Hacía muchísimos años que no comía Phoskitos y cuando los vi de casualidad en Pinterest, me animé a prepararlos en casa 🙂 Si te gusta soprender a los que más quieres con dulces caseros, esta receta te va a encantar.
¿Alguna vez has comido Phoskitos?
Estoy segura que sí. Cuando era pequeña me encantaban. Me los iba comiendo a mordiscos siguiendo la espiral hasta que llegaba al final en el que sólo quedaba la nata.
Para que los puedas preparar en casa sin complicaciones, he preparado un foto-tutorial que ilustra los pasos más complicados. ¿Me sigues?
Como ves, los ingredientes para preparar Phoskitos son fáciles de encontrar en cualquier despensa ¿te falta alguno?
Lo primero que tendrás que hacer es preparar la plancha de bizcocho y por ello debes montar las claras a punto de nieve con 50 gr. de azúcar y mezclar el resto de los ingredientes en otro bol hasta que te queden así:
Para hornear la plancha de los Phoskitos usa una bandeja pequeña y te asegurarás de que tiene el grosor prefecto. Ahora te toca darle la vuelta encima de otro papel vegetal.
Retira el papel que estaba debajo de la bandeja:
Y aprovechando que la plancha está caliente, enróllala con el otro papel para que coja forma de espiral. Este es uno de los pasos más delicados ya que tienes que vigilar que la plancha no se rompa. Una buena forma de evitarlo, es recortando los bordes como ves en la foto:
Déjala en el refrigerador durante 1 hora. Mientras esperas, puedes preparar el relleno y meterlo dentro de la manga pastelera como te enseño en la foto. ¡Es la forma más limpia de hacerlo!
Una vez la manga pastelera está preparada viene lo más divertido: esparcir el relleno por toda la plancha y enrollarla de nuevo 🙂
Después de dejarlo 30 minutos más en la nevera, tienes que cortar el tronco a rodajas de 1,5 cm, colocar tu rejilla de microondas sobre un plato y bañar las rodajas con chocolate. El plato te permitirá reutilizar el chocolate que se cae para bañar el resto.
Deja que el chocolate endurezca en la nevera y estarán listos para comer, ¡buen provecho! 🙂
- 4 huevos
- 50 ml. leche
- 50 gr. aceite de oliva
- 80 gr. harina
- 70 gr. azúcar
- 250 gr. queso tipo requesón
- 100 gr. queso de untar (tipo Philadelphia)
- 15 gr. azúcar glass
- 5 gr. azúcar avainillado / vainillina
- 200 gr. chocolate para fundir (55% de cacao)
- 50 gr. de mantequilla
- 50 gr. de agua
- Primero de todo, deja todos los ingredientes pesados.
- Precalienta el horno a 160ºC.
- Separa las claras de las yemas en dos boles distintos
- En el bol con las yemas, incorpora la leche, el aceite, la harina y 20 gr. de azúcar. Mézclalo todo con una batidora de varillas hasta que quede una mezcla homogénea como la de la foto.
- Monta las claras a punto de nieve junto al resto del azúcar.
- Incorpora las claras en el otro bol hasta que se hayan integrado en la mezcla. Es importante que lo hagas mediante movimientos envolventes de arriba para abajo para que las claras no se desmonten.
- Vierte la mezcla en una bandeja forrada con papel vegetal y hornéala durante 15 minutos. No te preocupes si por encima no coge color.
- Vuelca la plancha sobre otro papel vegetal y retira el que está pegado encima de ella.
- Si alguno de los bordes te ha quedado duro o quemado, recórtalo con un cuchillo.
- Haz un rollo con la plancha pegada al nuevo papel procurando que no se rompa y que no quede hueco entre la espiral que se forma. Es importante que hagas este paso mientras la plancha está caliente para que se quede con la forma que le das.
- Forra el rulo con papel film y deja que repose en la nevera durante 1 hora.
- Desenrolla la espiral y esparece el relleno de queso por encima con la ayuda de una manga pastelera como ya hiciste en el bizcocho de moniato.
- Enrolla la plancha de nuevo y déjala un mínimo de 30 minutos más en la nevera para que el relleno quede compacto.
- Corta el rulo a trozos de 1,5 cm y ponlos encima de una rejilla (por ejemplo, la del microondas), con un plato debajo.
- Baña cada Phoskito con un poco de cobertura. El truco está en echar una buena cantidad de cobertura de chocolate encima de cada uno y con la ayuda de una lengua, esparcir la montañita desde el centro hacia los lados para que también queden bañaos mediante un “efecto cascada”.
- Con la ayuda de una espátula, retira los Phoskitos bañados y colócalos en un plato en el refrigerador.
- Repite el proceso hasta que todos los Phoskitos queden bañados. Rellena el bol con la cobertura que cae en el plato.
- Deja que reposen en el refrigerador hasta que el chocolate haya endurecido.
- Si quieres que te queden bañados al 100% puedes repetir el mismo proceso poniendo los Phoskitos al revés. Yo sólo los bañé por una cara ya que para mí, hacerlos caseros implica que sean más saludables (por lo poquito que sea). ¡Enhorabuena, ya puedes disfrutar de ellos y compartirlos con las personas que más quieres! 🙂
- En una picadora o con la ayuda del minipímer mezcla todos los ingredientes hasta que queden bien integrados y la textura granulosa del requesón ya no se perciba.
- Derrite todos los ingredientes al baño María.
A tener en cuenta:
La bandeja para horno que he usado mide 32 cm de largo y 22 cm de ancho.
Si los haces en casa, prueba con otras variantes como rellenarlos con salsa de caramelo y cubrirlos con chocolate con leche. También puedes esparcir un poco de granito de almendra tostada por encima o simplemente, bañar el tronco entero con el chocolate, ¡seguro que sabe genial!
¿Cómo te ha quedado?
Si te animaste a prepararlos en casa estaré encantada de ver tus fotos. Puedes compartirlas en mi página de Facebook o en Instagram con el hashtag #setuchef. Si lo prefieres, también me las puedes mandar a anna@sanaysexy.com
Gemma
5 Nov 2015¿Hace falta que la fotografía de los phoskitos recién hechos encima de la rejilla sea tan… taaaan… taaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaan comestible?
Ets una crack 🙂
¡5 estrellazas para la chica dulce!
Anna
5 Nov 2015¡Lo más dulce son tus comentarios, Gemma!
La misma técnica te sirve tanto para bañar Phoskitos como para bañar pasteles. Lo más complicado es que no te quede todo lleno de chocolate. Un abrazo 🙂